Oración para aquellos que enfrentan una muerte inesperada
Oración para aquellos que enfrentan una muerte inesperada
Padre mío, dueño de la vida eterna:
Incontables son las pruebas que afrontamos a lo largo de toda esta compleja vida, a través de ellas aprendemos mucho, pero existen algunas lecciones más difíciles de asimilar que otras, porque sus objetivos son de difícil comprensión, como es la partida de un ser amado de manera inesperada. La muerte súbita, el fallecimiento inesperado, es de lo más difícil de aceptar.
Inocentes e ingenuos somos, que olvidamos que desde el primer grito o llanto que damos al comenzar la vida, la muerte nos espera en algún lugar del futuro. Nos vemos rodeados de nuestros seres queridos, y la vida nos parece perfecta así… sin recordar que todo puede acabar cuando menos lo esperamos.
Más cuando aquel golpe frío, seco y tajante llega a desestabilizarnos, a despertarnos de aquella utopía de la vida sin imperfecciones… es cuando vemos en nuestras manos, en nuestra vida misma, un vacío que al principio creemos no poder rellenar con nada. Ahí es entonces, cuando debe entrar la razón de nuevo en nosotros, para recordarnos que todos somos simples pasajeros de este mismo tren que nos retornará a tu morada, pero que antes deberá llevarnos por ese carril de aprendizaje que muchos transitamos de múltiples formas.
Ayúdanos a que tengamos siempre en mente que la fortaleza, cordura y mansedumbre nunca deben abandonarnos, más aún en estos momentos críticos, cuando creemos que nada puede sustituir lo que hemos perdido.
Ayúdanos a encontrar esa respuesta en nuestro corazón, y ser conscientes que así como nos tocó resignarnos a esa pérdida, otros deberán acostumbrarse a la nuestra cuando recibamos nuevamente aquel llamado a tu encuentro.
Ayúdanos a encontrar las palabras precisas de consuelo, que aunque al principio parezcan inútiles, pueden consolar a otros que también han pasado por lo mismo. Palabras que puedan resultar como el bálsamo que necesiten en tan difícil momento, que al menos puedan ayudar a hacer algo más tolerable la pérdida del ser querido.
Y al final, al sobrevenir aquél fatal momento de la partida de algún ser amado y sufrir de manera irremediablemente por ello, que aquellos días consiguientes de resignación nos permitan, aunque de manera abstracta, devolvernos la paz a todos los dolientes y saber que tan sólo él o ella ya tienen la dicha de estar compartiendo todas las bondades divinas contigo.
Todo sea por tu gracia y la calma nuestra.
AMÉN.
© Autor: Shoshan
Oración para aquellos que enfrentan una muerte inesperada. Oración de luto, para enfrentar los duros tiempos que se vienen después de una muerte inesperada, un fallecimiento que no esperaba, un adiós que nos pilla desprevenidos.
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