Oración de un padre desempleado buscando trabajo
Oración de un padre que necesita trabajo para el sustento de su familia
Padre amado, padre eterno:
Con la mirada perdida y mis pies cansados vengo ante ti para pedirte un trabajo, un sustento para llevar a mi hogar que carece de todo por falta de dinero.
Ya me siento indigno por no proveer lo que prometí ante tu presencia: cuidar de mi familia, pero los caminos de la vida a veces nos llevan en direcciones incorrectas, o simplemente, en todo el mundo hay situaciones así, en los que cuesta salir adelante y encontrar trabajo.
Te pido que me ayudes a tener un trabajo, por humilde que sea; sabré aprovecharlo para beneficio de los míos y tranquilad mía. Cuando con esperanza llamo a una puerta buscando trabajo, y la respuesta es negativa, mi mundo se cae a pedazos y lloro… sí Dios lloro por no poder cumplir con mis promesas.
Pero yo creo en tu misericordia, en el inmenso poder que tienes sobre todo lo que se mueve, y eso me da valor para traerte mi pesada carga y me alivies. Yo sólo soy un ser humano y nada puedo hacer, sólo esperar en ti.
Necesito trabajar para mis hijos, necesito el sustento diario. Señor, dueño de toda mi vida, escúchame y ayúdame. Que mañana al amanecer, cuando mis cansados pies lleguen a una persona que puede ofrecer trabajo, seas tú el que interceda por mí para que me sea dado lo que me corresponde: un trabajo digno para poder dignificarme como persona, como jefe de familia.
Aquí te dejo mi petición que estoy seguro que tú le darás una solución, porque yo creo en ti, conoces mi corazón y siempre te he amado. No me abandones Señor, no me dejes solo en este constante y mal sueño.
Todos tenemos derechos a un trabajo, a tener sueños que realizar con nuestros seres amados. Así será. Así lo creo, porque yo creo en tu infinito amor.
Con mucha humildad te lo ruego mi Dios.
Gracias por escucharme.
En el nombre del Padre y del Espíritu Santo,
amén.
© Autor: Shoshan
Oración de un padre pidiendo por un trabajo
La vida no es fácil, y muchas veces los padres, hombres que intentamos ser la cabeza de la familia, que sostienen al hogar sacrificándose lo que sea necesario por el sustento de la familia… nos vemos sin trabajo, sin nada que llevar a nuestros hijos, hijas, mujer y esposa, madre de nuestros hijos. No es una situación fácil de sobrellevar, es duro desilusionarnos con trabajos que no logramos obtener. Es incómodo no poder proveer a nuestras familias, darles lo que merecen y en especial, lo que necesitan. Que Dios nos ayude a encontrar empleo, y podamos ofrecer a nuestro hogar lo que más necesita.
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